EN EL DEPORTE: MEJOR ATENDER BIEN QUE ATENDER MUCHO
Durante la práctica deportiva afrontamos múltiples situaciones en las que nuestra cabeza debe procesar mucha información muy diversa, para poder dar una respuesta adecuada a cada momento, y con el objetivo de realizar la acción más óptima para obtener el mayor rendimiento.
En este proceso la atención juega un papel importante porque es la puerta de entrada de la información que recibe el deportista y, en base a esta información, su cuerpo responderá de una manera u otra.
Los que practicamos deporte siempre hemos oído expresiones como: estate atento!!, no te despistes!!, concéntrate!!, no estáis en el campo!!, tenéis la cabeza en otro sitio!!,...; que tiene relación con los procesos atencionales. Sin embargo, muchas veces caemos en el error de pensar que lo importante en el deporte es estar MUY ATENTOS, o tener UNA ELEVADA ATENCIÓN durante la actividad deportiva. Pero realmente para mejorar nuestro rendimiento ésta idea no es la más adecuada.
Hay muchos tipos de atenciones.
1.- ATENCIÓN SOSTENIDA, que es la capacidad de atender a un mismo estímulo durante un tiempo prolongado sin que nuestro rendimiento baje ( los jugadores de ajedrez tienen que tener una capacidad para mantener la atención durante toda la partida, porque cualquier pequeño fallo puede provocar la derrota).
2.- ATENCIÓN FOCALIZADA: atender un estímulo concreto durante un breve período de tiempo (los tiradores de arco cuando miran fijamente la diana para intentar dar en el centro).
3.- ATENCIÓN DIVIDIDA: poder atender a varios estímulos al mismo tiempo sin que baje el rendimiento (las nadadoras de natación sincronizada porque tiene que estar atentas a sus acciones y a las de sus compañeras para que el ejercicio salga perfecto).
Por otro lado en el deporte también se habla de foco atencional para referirse a la atención, y suele dividirse de la siguiente manera:
AMPLITUD
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AMPLIO
(varias señales)
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Evaluar una situación externa rápidamente (cuando un jugador que va a realizar un pase mira la posición de los jugadores de campo)
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Cuando planificamos una estrategia durante un descanso, o antes de empezar la acción deportiva.
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ESTRECHO
(una o dos señales)
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Enfocar una o des señales externas (la pelota entes de realizar un golpe de tenis)
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Representar mentalmente una ejecución futura o controlar un estado mental
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EXTERNO
(hacia fuera de la persona)
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INTERNO
(hacia dentro de la persona)
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DIRECCIÓN
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Una vez expuestos los tipos de atención o foco atencional, el deportista debe saber que para mejorar su rendimiento lo importante no es tener una elevada atención sostenida, dividida o focalizada, o un elevado foco atencional amplio-estrecho, o estrecho-estrecho, o amplio-interno, o interno-interno. Lo más importante es saber qué tipo de atención debo usar en cada momento. Es decir, aprender a identificar los estímulos relevantes en cada momento de la práctica deportiva, para poder dedicar el máximo de recursos atencionales y así obtener información útil para mejorar mi rendimiento. Por ejemplo: un ciclista debe saber que durante una etapa su atención debe cambiar, no es lo mismo rodar en el pelotón con 200 corredores todos pegados (debe estar muy pendiente de las ruedas que están cerca para no caer, atención focalizada, foco estrecho-estrecho), que escalar un puerto (puedo estar sufriendo e intento controlar mis fuerzas foco estrecho-interno), o durante una escapada con compañeros (tengo que estar pendiente de dos o más corredores, y mirar al de delante sin descuidar el que me viene detrás, atención dividida),...
En todos los deporte hay momentos para desconectar, otros en los que tengo que pensar la estrategia, o tengo que comer, o tengo que estar concentrado en el esfuerzo, o en el terreno,... Lo importante es aprender a detectar estas situaciones y NO EN ESTAR MUY CONCENTRADO, SINO ATENDER LA INFORMACIÓN IMPORTANTE EN CADA MOMENTO.
Si no tenemos en cuenta estos aspectos podemos caer en errores, los más habituales suelen ser atender eventos pasados y atender eventos futuros, eventos que provocan que nuestra cabeza se centre en estímulos distractores que nos alejan de la mejora del rendimiento. ¿Quién no ha perdido un partido por estar pendiente de cómo lo iba a celebrar (futuro)?, ¿quien no ha tenido un desfallecimiento porque en vez de comer y beber estaba pendiente de no bajar el ritmo por miedo a descolgarse (futuro)?, ¿quien no se ha caído practicando mountain-bike o trail-running porque estaba pensando en la subida tan lenta que acaba de hacer (pasado)', ¿quién no ha tenido un entrenamiento horroroso por estar pensando en que el día anterior quedó el último del grupo (pasado)?, ¿quien no ha visto como un pequeño ruido o dolor acababa con una prueba por no poder quitárnoslo de la cabeza? ....
Todo estos ejemplos no sirven para darnos cuenta de la importancia de saber detectar la información relevante en cada momento de la actividad y así poder atender estas señales y no otras que no nos servirían para mejorar nuestro rendimiento (distractores). RECORDAD LO IMPORTANTE NO ES ATENDER MUCHO SINO ATENDER BIEN. Si lo conseguimos veremos como los estímulos que nos pueden distraer parece que desaparecen y nos concentramos mejor en la actividad.
Un ejemplo es el siguiente ejercicio. Fijad la vista en el punto negro del centro durante unos segundos y mirad que pasa. Si el punto fuese la información relevante ¿qué sucede con todo lo que está a su alrededor?
Salud, y deporte para todos!!!
