lunes, 23 de noviembre de 2020

RENDIMIENTO = POTENCIAL - INTERFERENCIAS

Según los modelos de Tim Gallwey y John Whitmore,  en el deporte, como en tu vida personal, el RENDIMIENTO = POTENCIAL - MENOS INTERFERENCIAS.

El problema es que solemos dedicar la mayoría de nuestro tiempo y esfuerzo a intentar aumentar lo que se nos da bien (ya sea a nivel físico como mental-psicológico); y descuidamos por completo los factores que nos influyen negativamente en nuestro rendimiento (problemas familiares, presión laboral, dificultades económicas, tensión en las relaciones de pareja,....).

No se trata de dedicar tiempo y esfuerzo a preocuparnos por nuestras interferencias, ya que lo único que conseguiremos será malgastar energía física y mental. Sin embargo, si somos conscientes de lo que nos dificulta avanzar,  podemos intentar corregir algunos aspectos de nuestro día a día, para sacar el máximo potencial de nuestras capacidades.

Lo más importante para manejar mejor nuestras interferencias es conocerlas, y aquí es donde entra en juego el diálogo interior. Dicho diálogo vendría a ser la capacidad para ser conscientes de nuestra interferencias, de aquello que nos limita o dificulta nuestra mejora personal.

Hoy en día, con las redes sociales, tenemos la tendencia de proyectar nuestras virtudes y a esconder nuestros defectos. Esta forma de actuar es una manera de autoengañarnos a nosotros mismos, de ocultar nuestra auténtica realidad, y por lo tanto ponernos más dificultades para mejorar nuestro rendimiento personal y deportivo.

Conocer tus limitaciones no implica vivir constantemente en tus errores, sino simplemente conocerlos y ver la forma de corregirlos, para aprovechar mejor tu potencial.

Como aparece en el libro "El juego interior del tenis" , muchas veces te puedes convertir en tu peor enemigo. Me sorprende la cantidad de deportistas y personas que les cuesta horrores entrenar solos, hacer actividades sin compañía o simplemente pasar el tiempo con uno mismo. Uno de los males de hoy día es que estamos más pendientes de lo que sucede a nuestro alrededor y de la imagen que proyectamos, que de conocernos a nosotros mismos.

En una entrada anterior titulada ¿Cómo estás? No, no, que ¿cómo estás? ya hablábamos de la importancia de reconocer nuestro estado mental. Para tener tu mejor rendimiento deportivo como personal, lo que debes dominar es tus recursos, y esto supone que debes conocerte a ti mismo de la manera más preciso posible.

Personalmente me encanta pasar tiempo solo, o correr horas por el monte sin compañía y sin música. No negaré que haya días que me cueste, pero al final te permite conocerte muy bien. Sabes interpretar las señales de tu cuerpo, aprendes a gestionar tus pensamientos, descubres debilidades, detectas fortalezas, practicas la toma de decisiones cuando estás cansado, intentas manejar las molestias físicas,... Todo ello hace que luego en competiciones o ante algún problema en la vida, sepas mejor como actuar porque ya conoces como reacciona tu mente y tu cuerpo, y no dejas que te limiten a la hora de desplegar tu potencial. 

Actualmente mucha gente no se conoce a sí mismo, y parece que siempre tiene que hacer las cosas en compañía de otros, y en mi opinión, esto hace que cada día las personas nos conozcamos menos a nosotros mismos, y luego cuando tenemos que afrontar retos de forma individual no sepamos gestionar nuestras debilidades, que estaban escondidas en nuestra "gran vida social". En este estudio de la Universidad de Virgina encontraron que había que personas que preferían una descarga eléctrica antes que pasar tiempo solos.

Por lo tanto, si quieres mejorar tu rendimiento deportivo y personal, aprende a pasar tiempo solo, conoce tus errores, tus defectos, no para lamentarte, sino para intentar corregirlos y explotar mejor tu potencial. No se trata de convertirte en un ermitaño antisocial, se trata de conocerte a ti mismo lo mejor posible, porque al fin y al cabo (te guste o no), tu eres con quien pasas más tiempo. Tu tienes que gestionar tus interferencias y tu potencial, nadie lo hará por tu. Porque, tu eres el responsable de intentar conseguir tus objetivos.

RECOMENDACIONES:

- Intenta combinar actividades solo y acompañado.

- No evites tus pensamientos, simplemente sé consciente de ellos.

- Intenta buscar soluciones a tus problemas.

- Apunta lo que crees que te dificulta mejorar, y qué puedes hacer para corregirlo.

- Pasa tiempo sin hacer nada, solo, sin música ni distracciones.

- Apunta lo que crees que son tus virtudes, tus potenciales. No los olvides.

- Comparte tus defectos con alguna persona de confianza, siempre es bueno tener otro punto de vista.

- Recuerda que tu eres la persona con quien vas a compartir tu vida, conócete bien para rendir mejor.


#sigan




No hay comentarios:

Publicar un comentario